MMS trabaja en pocas horas la mayoría de las veces. Destruye incluso al asesino #1 de la humanidad, la malaria, en 4 horas. La víctima regresa a trabajar al siguiente día.
Si los pacientes de cualquier hospital fueran tratados con este mineral, más del 50% de ellos estarían de vuelta sanos en su casa en menos de una semana.
Aunque parezca increíble, cuando es usado correctamente, el sistema inmunológico puede usar a este asesino para atacar a aquellos gérmenes, bacterias, virus, hongos y otros tipos de microorganismos que representan un peligro para el cuerpo humano. No afecta la bacteria amigable, incluyendo a la flora, ni a las células sanas.
MMS es la mejor respuesta a las enfermedades de la humanidad que hasta ahora se conocen, y no es un medicamento. Si se toma el tiempo de investigar información en esta u otras páginas relacionadas con MMS o si lee las historias de casos exitosos sabemos que estará lo suficientemente convencido como para empezar a usar la solución.
La gran mayoría de los médicos y terapeutas que han leído el libro y las historias no les quedan dudas de la eficacia de MMS. La razón por la que creen no es precisamente por las historias escritas por la misma gente sino porque el libro explica a detalle la química de cómo y por qué MMS trabaja. La química no miente.
La ciencia es la ciencia y los médicos tienen el conocimiento y entendimiento suficientes tanto de química como de ciencia como para aceptar que no hay argumento que invalide el cómo la química trabaja.
MMS es una de las cosas más puras que puede tomar. Los medicamentos e inclusive los nutrientes contienen un sin número de combinaciones de químicos y diferentes elementos. Esa es generalmente la razón por la cual se provocan los efectos secundarios.
No hay nada más, y esta combinación pasa a ser uno de los asesinos de patógenos más poderosos conocidos por el hombre. Ha sido inclusive utilizada en campos de ganado para matar los patógenos de la carne de res, en sacrificadoras avícolas; se ha usado para esterilizar pisos, mesas y bancas de hospitales y para matar patógenos en procesos relacionados con el agua potable sin dañar la bacteria benéfica por más de 70 años.
Ahora esta misma fórmula se usa en el cuerpo humano, y sucede lo mismo. No hay daño alguno a nuestro organismo pero los patógenos son destruidos. En su forma potencializada MMS es dióxido de clorina que se revierte a simple e inofensivo cloruro y oxígeno neutralizado. No deja nada en el cuerpo que pueda acumularse. Tómese el tiempo y aprenda todo lo que pueda.
Jim tuvo la gran suerte de descubrir lo que muchas personas alrededor del mundo ya utilizaban bajo diferentes nombres.
Él descubrió una manera de llevar la información al público en general en vez de dejar que esa información permaneciera guardada o escondida en hospitales y clínicas sin utilizarse.
Jim inventó MMS de cierta manera al descubrir que cura la malaria mientras estaba en la selva, pero pronto se percató de que otras personas lo habían estado usando en cantidades mucho menores por 20 años o más.
La realidad es que MMS trata casi todas las enfermedades incluyendo aquellas que se dicen “incurables”.
Es un gran honor y felicidad para Jim el poder llevar esto a la luz pública así que es tiempo que usted se entere por voluntad propia … ”
Jim Humble.